domingo, 23 de junio de 2013

¿Y ahora qué?


Lamento mucho no poder escribir más seguido, pero desde que regresé a Guayaquil, he vivido un oleaje increíble de actividades. Suena justo tener algo de rutina después de un viaje de aventuras en el que todo el rato estaba lejos de mi zona de confort.

Primero, estoy trabajando en una empresa que provee materiales de construcción a grosso modo. Yo soy traductora de negociaciones con unos chinos que están construyendo las nuevas instalaciones de la Holcim (Una multinacional importante de la industria del cemento).

Mi trabajo es agradable, aunque a veces tengo que participar en la logística que es algo cansada(pese a no hacer nada) e innecesaria para mí. 

Mis otras actividades actuales:
  • Creo el sitio web de la empresa donde trabajo.
  • Trabajo en mi sitio web www.hoyengye.info
  • Me hice miembro de la organización por la cual me fui de intercambio AIESEC.
  • Canté para un show de niños (Fui Cenicienta, aunque descubrí que prefiero ser hermanastra o malvada) 
  • Audicioné para un musical.

La audición fue agradable. Primero porque ya he trabajado con ese director, entonces se alegró mucho al verme. ¡Fue muy emotivo! Quise audicionar, (pese a que no podré estar en el musical por mi nuevo trabajo), porque quería que me escucharan y no me gusta cerrar oportunidades. Me puse un poco nerviosa, y canté Somewhere over the rainbow, aunque quería cantar On my own de Los Miserables.  : )

En julio espero retomar mis clases de piano, guitarra, canto y baile. ¿Hago muchas cosas? Ehm, sí, pero me alcanza el tiempo. ¿Tengo vida social? Interactuar en mi trabajo es mi vida social. ¿Duermo? 7 horas, pero soy un zombie viviente. Creo que alguna actividad tendré que sacar de mi lista.

Hago lo que siento que debo hacer, porque tengo una meta. Pero es un secreto.

En fin, el día de hoy mi escrito no es sobre una aventura en un país extranjero. El día de hoy escribo la aventura en mi ciudad de descanso. ¿Cuál es el siguiente paso después de 3 meses en Guayaquil? Aún no sé, pero seguiré lo único a lo que trato de escuchar...¿Mi corazón? No. ¿La razón? No, mi intuición.

PD: Iba a escribir sobre la imagen de cristal en los negocios, y la queja de que los hombres más interesantes que he conocido, a los cuales les he tomado gran afecto y he tenido lindas historias siempre están en el extranjero. Sin embargo, escribí algo superfluo. Prometo escribir sobre esto la próxima vez.

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